2011-03-27

La Estación

De pronto, el mundo se encuentra ajeno a su dolor. El tránsito intermitente de esta ciudad enciende y apaga su Corazón. Las lágrimas son un testigo impotente de su desayuno amargo. Café y despedida. La misma despedida que abriría una fosa común a todos sus sueños en la fría mañana de Marzo.

¿Has oido cómo rompe tu Alma contra el cemento de la ciudad?, ¿has oido cómo cruje contra el alcantarillado? Contra esos barrotes oxidados de sueños. Contra los vértices apuntados de las baldosas azules. Contra tiempo de correr en busca de su abrazo mudo.

Abrasiva calzada. Ansiedad incandescente que desciende por tus mejillas. Desayunar la Ausencia en su estela boreal. Te frotarías los ojos con cristales. La muerte en tu pecho.

En tu pecho la muerte. Si quisieras huir correrías justo en la dirección contraria; sin miedo, sin valor. Te odias una vez más por no espetarle un Te Quiero a la cara.

Cobarde.

Bienvenido al Reino de la Esperanza.

Los Dioses también follan.

Los Dioses también follan, solo que lo hacen distinto a nosotros los mortales. Ellos dan su vida a cambio de tan preciado placer. Literalmente, su Vida.

He tenido el privilegio de encontrar unos manuscritos en muy buenas condiciones, tan solo faltan algunas palabras que no me atreveré a completar. Encontré dos extractos de lo que pudo ser un poemario a la Diosa del Mar de algún Dios poseido por el sentimiento desbordado del Amor carnal. Quién fuera uno de estos Dioses.


A la Diosa del Mar:

Follarla con el Corazón.
Cuando eyaculé lágrimas de sangre en su pecho,
Eyaculé sangre en cada contracción.
Contuve la respiración; era Ella,
Era Ella y era Dios;
Éramos los dos.

Follarla con el Corazón,
Para eyacular lágrimas ensangrentadas contra sus labios,
Contra su pecho desnudo; Y sus labios.
Exasperé y era Ella,
Era Ella y el dolor;
Éramos los dos.

Prueba el Amor de mis entrañas,
aquél que reconocerás si lo vuelves a sentir;
Brota del pulso de dos cuerpos enfrentados,
brota de ti y brota de mi.

*

Me apetece, Dios, recorrer todo su cuerpo;
Devolverle la Vida;
Que mis labios mueran en su pecho,
puro, divino, vírgen.

Hastiarla de sexo y de rabia entre sus muslos;
Hacerle el Amor para siempre.
Sembrarme en su sexo;
crecer en su corazón.
Salir,
emerger por los ojos;
crugir en su piel,
bordarle las costuras de la imaginación.



*

2011-03-18

Orillas del Amor

Como una vela sobre el Mar
resume ese azulado afán que se levanta
hasta las estrellas futuras,
hecho escala de olas
por donde pies divinos descienden al abismo,
también tu forma misma,
ángel, demonio, sueño de un Amor soñado,
resume en mí un afán que en otro tiempo levantaba
hasta las nubes sus olas melancólicas.

Sintiendo todavía los pulsos de ese afán,
yo, el más enamorado,
en las orillas del Amor,
sin que una luz me vea
definitivamente muerto o vivo,
contemplo sus olas y quisiera anegarme,
deseando perdidamente
descender, como los ángeles aquellos por la escala de espuma,
hasta el fondo del mismo Amor que ningún hombre ha visto.

L.Cernuda


['Si no te conozco, no he vivido; si muero sin conocerte, no muero, porque no he vivido.']



*




2011-03-16

Siglo XXI

Las palabras están sobrevaloradas.
La poesía está sobrevalorada.
Las canciones de Amor están sobrevaloradas.
Las cartas a escritas a mano están sobrevaloradas.
Las grabaciones de mensajes están sobrevalorados.
El dolor por la pérdida está sobrevalorado.
El alcohol está sobrevalorado.
La sangre está sobrevalorada.
Los intentos de suicidio están sobrevalorados.


Pensar está sobrevalorado.
Sufrir está sobrevalorado.
Llorar está sobrevalorado.
Amar está sobrevalorado.

Sentir está sobrevalorado.



*

Contemplando la Isla

-Qué contemplas con tanta atención?

-Nada

-Si no contemplas nada... ¿En qué piensas?

-En nada.

-Entonces?

-Quiero llegar hasta esa isla.

-Y tanto has de pensar pues?

-Solo puedo llegar nadando y pienso si sabré sortear los obstaculos que me vendrán impuestos por el inmenso mar o me ahogaré en el intento.

-...Crees que merece la pena? Quizá es mejor contemplarla de lejos y poder admirar su belleza igualmente.

-Puede ser..., pero entonces me perdería el gran tesoro de admirar de cerca los detalles que oculta en su interior.

-Esa isla existirá siempre...

-Lo sé, pero a veces las nubes impiden que la pueda ver y seguro que perderé el norte.

-Y qué harás entonces?

-Sabes que siempre me ha dado miedo el mar...

-Por eso lo digo.

-De momento contemplar, y si un destello proviniera de ella sabría que ha sido un giño, una señal.

-Y si te cansas de nadar y la tormenta te arrastra?
Como volverás a tierra?

-No volveré, querré morir en el camino y que sea la tierra de debajo del mar la que me trague y no la de la superficie.

-Veo que lo tienes muy claro...

-...Contemplo tan solo

-Lo harás?

-Repito, contemplo solo. Esa isla puede ser incluso una ilusión.

-Entonces?

-Ha sido bonito imaginar el camino...

-...

La Sal Escuece

Como si tuviera un destornillador que se retuerce en silencio bajo las sábanas de su cuerpo. Es como si sujetara sin fuerza el mango y una fuerza descomunal ejerciera la presión contra todo movimiento. Ajetreando las entrañas, enhebrando los cristales de la indiferencia.

Te quieres vendar los ojos. Te quieres estallar los oidos. No sentir jamás a través de lo humanamente sensible por donde penetra el dolor que no tiene explicación. Las astillas flotando en el mar de las dudas. No son sólo lágrimas, son alimento de la tierra seca adherida a la piel humana. Donde hubo ojos hay sal. Donde hubo boca hay azafrán. Donde hubo piel hay cuero, y por el cuero es difícil penetrar.

Se lija la cara y sale a la calle. Ya no busca Amor, busca mentiras. Busca una mentira que le devuelva la Fe en algo tan inestable como es el sentimiento humano. La mentira es algo más humano que el Amor, nada que ver con el Arrepentimiento.

Busca con hambre en las esquinas donde la noche salpique su cara de sangre y sus manos arcillosas le den forma a su corazón en el torno de la Vida. Si pudieran reconstruir su fe ciega...¡Ay si pudiera aferrarse a la Fe más ciega!, se lanzaría a los brazos de esa chica que le encharcó el corazón. Pero no quiere o no puede o no recuerda ya cómo es saltar sin cuerda. Y lo ha hecho tantas veces... Sin embargo, de pronto, todo lo aprendido no es recordado y debería poder navegar en el recuerdo; pero el fracaso en el intento le lleva a naufragar entre sus propios restos.

El pájaro del trino alegre le acompaña en las mañanas que hace sol, pero es el cascabel que arrastra en su cola desplumada el que le devuelve a la realidad de las lagunas del Amor. Quédate quieto, alomejor es mejor. Los pasos los estás dando el espiral y probablemente tropieces sobre tus propios pies torpes. Paralizado. ¿Son los sentimientos tan indescriptibles?, se pregunta sin esperar respuesta de su eco sordo.

Nadie se atreve ya a cruzar por encima del agua hasta llegar a su orilla porque ambos tienen miedo de ahogarse en el intento. Así que se gritan cosas desde ambas orillas donde el viento mece las palabras a su antojo y el mensaje de los Amantes bien poco tiene que ver con lo que los corazones ansían sentir.

La sal de este mar escuece las pupilas.

El Valor por lo sentible está sobrevalorado hoy en día.

2011-03-13

Me Odio cuando Miento

Vimos pasar el cometa
tumbados sobre la arena,
hablando de cosas
que suenan trascendentes,
haciendo promesas
que tú y yo sabemos que no hay que cumplir.

Vimos hundirse la noche
en la distancia más corta,
robando los sueños
a la madrugada,
soñando despiertos
con que es más fácil lograr así un final feliz.

Y ahora me arrepiento
de no haber sabido aprovechar el momento,
y siento haber oído mi voz
diciendo que no importa nada,
que son cosas de la vida,
que algún día lo olvidaríamos los dos.

Me odio cuando miento,
me odio cuando miento.

Nos despedimos despacio
para alargar el momento,
siendo prudentes,
por no decir cobardes,
y apretando los dientes
para no decir 'yo me quiero quedar aquí contigo'.

Y ahora me arrepiento
de no haber sabido aprovechar el momento,
y siento haber oído mi voz
diciendo que no importa nada,
que son cosas de la vida,
que algún día lo olvidaríamos los dos.

Me odio cuando miento,
me odio cuando miento.

Me odio cuando miento,
también cuando me mienten
mentiras que pretenden
borrar los sentimientos.
Me odio cuando miento.



*

Fangoria

Perlas Ensangrentadas y Flores Sembradas.

Me hago eco de unas palabras que anoche dijo Alaska en su concierto y las utilizo a modo de título, ya que igualmente iba a balbucear una historia sin sentido alguno sobre flores y demás tonterías que los Enamorados utilizan para evitar las palabras.

Cuando te anulan el poder de la palabra en la distancia y cuando no hay forma humana de comunicarse, sólo quedan las 'corazonadas' que uno mismo va tramandose hasta crear una especie de monólogo interior en el que incluso llega a creerse sus propias reacciones y sentimientos. Uno está tan sólo, que la incidencia de la propia luz sobre su cuerpo proyectando una sombra le inquieta. Es la paranoia de no saber si es un ser comunicativo o si vive en su propio desierto emocional desde hace tiempo. Donde los espejismos le toman el relevo a la realidad y los transforma en sensaciones más o menos creibles. Cómo puede ser que al volver a sembrar sus flores naranjas nazcan ya muertas; que sea el exceso de oxígeno el que las esté matando. Cómo puede ser que de su boca salgan demonios con dagas que reflejan en sus afiladas cuchillas un abismo exámine, donde el éter reina y la mágia ya no es sino negra.

Tenía el corazón de madera y anoche descubríose carcoma. Ya no era el imperfecto tallaje hecho a mano de la madera que en las juntillas dejaba pasar en influjo de su rabia sino que, era más bien, una caja vacía. Los sentimientos se escaparon por los diminutos orificios obra de estos pequeños enseres. Ya no era, pues, trabajo de orífice sino del propio dueño reparar tan inestables grietas donde la madera era más vulnerable a la humedad, al llanto febril de un corazón irreparable. Al llanto por su Amada, aquella que en las largas noches hubo tallado y tallado sus dos nombres por siempre. Los Dos Enamorados. Ahora se encontraba lejos de Ella, con un corazón lleno de recuerdos grabados a golpe de cincél y agrietado por el paso de las horas. Fueron las primeras astillas en una noche de Enero las que delataron la tragedia. La sangre entraba a trompicones por el órgano acartonado. Los grumos rebasaban las paredes y no encontraba la forma de sortear aquel paso angosto por donde anteriormente fluía una sangre clara que alborotaba alegría y se asemejaba al vino tinto que se bebía en las fiestas de su pueblo. El traqueteo de los grumos resonaba en su delicada cajita de madera.

Las flores que le regaló eran de un color vivo, tan vivo que le recordaba a aquel Amor de Abril. Se ha apagado su sonrisa. Se han muerto sus flores. Se han callado los sentidos y se han abierto las heridas. Se ha embarrado la conciencia. Se han pisado sus sueños. Ya no hablan más. Ya no puede hablar. Y ya no puede comunicar sus ganas de fundirse con aquello que nunca fue suyo. Las pupilas ya no eran esperanza. Los labios ya no esperaban otro beso.

Se armó de valor, cerró la puerta de su casa ayudándose de un golpe seco y se cargó la pala al hombro. Se encaminaba hacia el bosque. La pala oxidada sobre el hombro derecho, su corazón desteñizo y astillado descansaba exhausto en la palma de su mano izquierda. Se fue a enterrar lo que nunca se atrevió.

Nunca volvieron.

Ni él, ni su Amor.

2011-03-12

Idiota

Ya está ahí la Luna.
Que perra la vida y esta soledad.
No quisiera perderme tu tren
y saber lo que es malgastarte.
Podría coger cualquier autobús
con tal de un beso más
pero tengo pesado el hogar
y ya no puedo hacerlo igual.
Puede que mañana me quiera ir.
Y puede también que mañana sea
la vida
y que mañana, no exista mañana.
No soy una niña.
No soy ese duende.
No soy luchadora.
No soy tu camino.
No soy buena amante,
ni soy buena esposa.
No soy una flor,
ni un trozo de pan.
Sólo soy esa cara de idiota
Idiota por tener que recordar la última vez
que te pedí tu amor.
Idiota por colgar tus besos con un marco rojo
por si ya no vuelvo a verlos más.
Idiota por perderme por si acaso te marchabas ya,
y tirar tu confianza desde mi cama hasta esa ventana.
No ves qué fácil ha sido para mí
perderlo todo en un momento.
Por mi miedo a perder,(bis)
por mi miedo a no controlar tu vuelo.
No soy una niña.
No soy ese duende.
No soy luchadora.
No soy tu camino.
No soy buena amante,
ni soy buena esposa.
No soy una flor,
ni un trozo de pan.
solo soy
esa cara de idiota
idiota esa cara de idiota
no ves que facil a sido para mi
perderlo todo en un momento.

Nena Daconte





[Remueve, que aún queda.]





*

2011-03-07

Te Regué con Sal.

Que no la culpo. Realmente no soy consciente de quién desdibujó primero los límites de nuestros labios aquella tarde en aquel restaurante de comida rápida. Todo borroso por un momento y no fui consciente del brutal vuelco que dió la Tierra en el interior de mi cuerpo. Un maremoto de fuerza descomunal penetraba la boca de la cueva buscando arrollar las paredes con susurrante espuma. La foz de abrió, la luz me impidió ver y mírame; estoy ciego en el recuerdo más perfecto. La muralla de hielo que existió sucumbió a su sal. El vaivén taciturno de un beso robado relamía el contorno dulce de nuestra resistencia al Amor. Me estaba Enamorando del mismísimo Amor y de su nombre. Quería que me tornase cetrino, como una fotografía suya para que recordara siempre el fulgor esperanza que la miraba fijamente. Porque aquel día la miré fijamente. Tan fijamente que sería capaz de recrear ese momento en mi joven memoria de forma fiel y verosimil a los que dudan de aquel momento pudiera ser real. Lo escribimos con agua y sal. Tu agua y tu sal.



'Yo que lo hago todo al revés,
tengo un agujero en el bolsillo
y sal de mar en la piel.'


2011-03-06

Thought.

-El día que me case, ¿vendrás a mi boda?

-Depende de lo que tenga que hacer ese día.

-Casarte conmigo.





*

2011-03-04

Preludio

'When you were a postcard it was more easier,

but you got lost altogether with the letters I sent.'






*

2011-03-03

Sobre escribir

La vida de un escritor es muy dura,
te obligan a escribir cuando estás felíz.

S.R.R.


Hace poco leí en algún lugar remoto de la blogsfera literaria amateur que todo aquel que escribe se oculta tras palabras. Inventa personajes y los situa en lugares hermosos para el disfrute de muchas almas que buscan devorar algo nuevo y real que no les haga daño, que les haga olvidar el día a día. Coincido con esa escritora en la idea de que nos ocultamos tras palabras, personajes que creamos y dotamos de personalidad propia y tras esos paisajes dignos de novela de ciencia-ficción. El lector, probablemente, lea algo de la vida y la personalidad de ese autor a través de sus palabras. Si está lo demasiado cerca de él y cree conocer su vida no tendrá demasiados porblemas para ver reflejadas todas las fobias, frustraciones y momentos amargos de los que el autor se pretende alejar alineando palabras en un folio, una tras otra, una tras otra. Ordenándolas en el espacio para que arrastren fuera de su cuerpo todo tipo de dolor. Los engranajes del corazón a piezas en el tintero.

No os engañeis. Nadie escribe para los demás ni por los demás. Uno siempre escribe para sí mismo, para disfrazar a través de la literatura sus miedos, sus desamores y su soledad. Para pedir auxilio y ser rescatado por algún lector que jamás conocerá su nombre, ni sus sueños. Más si éste utiliza un pseudónimo en lugar de su verdadera identidad. Detrás de cada fábula hay un temor a la vida, a vivir. Detrás de cada poema hay un miedo inconcebible al Amor, a Amar. Detrás de cada héroe hay un ideal que perseguir en vida. Detrás de cada villano, el odio más visceral al culpable de sus pesadillas diarias. Princesas, príncipes, dragones, gheisas, guerreros, panaderos, artistas, incluso escritores. Heróicas personalidades que se resuelven a diario.

Hacer de las palabras un mundo mágico, un mundo más real. Revistas literarias, concursos de relatos, poemas a la Amada, lecturas casi sagradas en algunas escaleras, las bibliocafeterías y las librerías de barrio, todas ellas conforman la sonrisa del trabajo reconocido; pero los escritores, más que los lectores, son habituales de la droga impregnada en la fibra vegetal que decora sus estanterías y escritorios. Un escritor no es sin la escritura, y si no encuentra papel, lo escribirá en la mente a modo de borrador. Los pliegues del cerebro dotados de recovecos donde las patitas de las letras se enganchan, finísimas ellas. Las principales venas y arterias transportan la tinta hasta los capilares de los dedos donde brotan los escritos de los grandes. Y no, no somos parciales a la hora de literarizar algún texto. Todo aquello con lo que nos sintamos identificados se llevará nuestro más preciado reconocimiento, sin embargo todo aquello que nos suene a chino o que nos parezca lejano, será poco menos que menospreciado, y esque no hay nada más bello en esta ciencia tan inexacta como es escribir que saberse comprendido, sonreir y pensar en silencio: Amigo...cuánto te entiendo.


Y esque no hay mayor tortura que escribir cuando uno es felíz y no tiene de qué desprenderse.




2011-03-02

Te Espero

Te espero cuando la noche se haga día,
suspiros de esperanzas ya perdidas.
No creo que vengas,
lo sé, sé que no vendrás.

Sé que la distancia te hiere,
sé que las noches son más frías,
sé que ya no estás.

Creo saber todo de ti.
Sé que el día de pronto se te hace noche:
sé que sueñas con mi amor,
pero no lo dices,
sé que soy un idiota al esperarte,
pues sé que no vendrás.

Te espero cuando miremos al cielo de noche:
tu allá,
yo aquí,
añorando aquellos días
en los que un beso marcó la despedida,
quizás por el resto de nuestras vidas.

Es triste hablar así.
Cuando el día se me hace de noche,
y la luna oculta ese sol tan radiante,
me siento sólo, lo sé;
nunca supe de nada tanto en mi vida,
solo sé que me encuentro muy sólo,
y que no estoy allí.

Mis disculpas por sentir así,
nunca mi intención ha sido ofenderte.
Nunca soñé con quererte,
ni con sentirme así.

Mi aire se acaba como agua en el desierto,
mi vida se acorta pues no te llevo dentro.
Mi esperanza de vivir eres tu,
y no estoy allí.
¿Por qué no estoy allí?,
te preguntarás…
¿Por qué no he tomado ese bus que me llevaría a ti?
Porque el mundo que llevo aquí no me permite estar allí,
porque todas las noches me torturo pensando en ti.
¿Por qué no sólo me olvido de ti?
¿Por qué no vivo sólo así?
¿Por qué no sólo…?


Mario Benedetti


2011-03-01

"Decororéame"

Con una mirada altanera se lo dijo todo...

Son muchas las reflexiones que a diario nos hacemos o nos hacen a modo de consejo o a modo de ensayo acerca del Amor o las relaciones interpersonales. Separo ambos términos porque yo los concibo de forma independiente pese a que están vinculados; pero no necesariamente.

Y digo no necesariamente, porque allí donde hay Amor no tiene porqué haber una relación y viceversa. Bien es sabido y bien hemos comprobado nosotros mismos a través de innumerables o escasas experiencias las complicaciones que nos suponen las relaciones entre personas, sean del tipo que sean. El Amor, en cambio, es un poco más autárquico. Se rige por él mismo y no depende de ningún otro tipo de sentimiento. Si pensamos en las relaciones personales esto no es así. Dependemos de un sentimiento, sea cual sea, para poder vincularnos a alguien. Sea familiar, sea amigo, sea conocido, sea compañero de trabajo o clase y sea la pareja. Cada relación es auténtica y además distingue entre personas. No es la misma relación la que mantenemos con nuestro primo que con nuestra madre. A veces nos soprendería la cantidad de combinaciones posibles. Tampoco lo és la que mantenemos con un amigo que con nuestra pareja. Puede ser la primera más intensa que la segunda o todo lo contrario, ser ésta última la que merezca nuestra más preciada devoción.

¿A qué viene todo esto? Ni yo mismo lo sé con exactitud. Puede deberse a que hace escasas horas que he aterrizado físicamente en mi ciudad, -que no mentalmente puesto que todavía me queda situarme-, o puede deberse a que la compañía de un café es más grata que la de cualquier boca muerta. Apenas llevo venticinco horas con aire sureño cuando de pronto me encuentro añorando cosas que recién he dejado atrás. Lo he tenido todo. Casi todo. Hace unas horas podía tocar la luna o enganchar mi cogote de su dedo meñique. Pero no. Somos así de caprichosos. Es ahora cuando encuentro a faltar algunas de las sensaciones más humanas.

Las he visto; pero no las he vivido. Las he clasificado, mientras he dormido. Mi último pensamiento diario era sorprender la manera de vivir intensamente los pequeños placeres en su nombre. Pero no. No los he vivido. ¿Por qué? Por la dignidad y el decoro. Cuando está en peligro la dignidad, uno huye corriendo a salvarla. Cuando está en peligro el decoro...el decoro nunca está en peligro. Se actua bajo su tejado. ¿Cuando está en peligro el Amor? El Amor siempre está en peligro. Y se desvincula estrepitosamente de cualquier relación interpersonal. Así, cuando nos queremos dar cuenta, hemos sentido Amor y no estamos junto a la persona Amada. Estamos junto a la persona -ya no Amada- y ya no sentimos Amor. Claro que hay varias combinaciones más, como creer sentir Amor y no ser así, forzarse uno mismo a creer que siente Amor, creer que el Amor tiene fácil confección y se puede fabricar o sentirlo desgarrante e intentar convencerse uno mismo de que todo irá a mejor. Por algo dicen que el Amor es caprichoso, y no es del todo incierto. Una vez leí en los azucarillos de mi preciado café la siguiente máxima: El Amor tiene fácil la entrada pero difícil la salida. De ahí no cambiaría ni una palabra, con la salvedad de que la A mayúscula en el término Amor corre por mi cuenta, pero no es difícil de intuir si uno lee regularmente algo de la bazofia que aquí vierto acerca del Amor, la Mierda y esas cosas de las que me gusta desvariar semanalmente. La explicación es muy sencilla. Es la de realzar el término por encima de los demás términos. La de exponerlo a otra categoría que, por desgracia, en lingüística no existe. Se queda en sustantivo y punto. Podríamos llamarla algo así como distintivo, a la categoría claro. Dentro del sustantivo estaría la subcategoría del distintivo. A ver qué le parece al señor Prunyonosa mi humilde aportación al mundo de la lingüística.

Lingüística aparte, lo que yo venía a reflexionar aquí en esta pantalla es con qué impunidad desperdiciamos los momentos a diario. Lo diré a través de una metáfora: uno pasa los días aislado de su fuente de calor, del fuego y de la Vida en su pequeña cueva de frías paredes y frías sábanas, cuando por fin emigra hacia esa estrella que le devuelve el riego sanguineo y le calienta el corazón. De pronto, nada. De pronto, hielo. De pronto el inerte averno por fuera y por dentro. Nuestro Palacio de Hielo.

¿Recuerdas nuestro Palacio de Hielo? Nunca vivimos allí. Lo destrozamos a base de ir acercando nuestros dedos de las manos. Se lo tragó tu mar. Soy testigo de días libres de nubes, días libres de caparazón. Al ritmo de clin-clin. Derrumbamiento polar. Ahora soy testigo de días de un Azuloscurocasinegro en este nuestro paraje de hielo.

Cuán cerca hemos estado de rozar el cielo de nuevo. Insisto, el decoro. El decoro y la madrequemeparió. El buen hacer y las buenas costumbres. El mal uso de Amor. El apagayvámonos de aquí, que llueve. El ojoporojo. El ahítequedas-ahíteden.

Por si acaso, me quedo mi Amor.

Por si acaso.

Por eso del decoro y tal...